jueves, 27 de diciembre de 2007

YO TAMBIÉN TENGO UN SUEÑO


Un 28 de agosto de 1963, Martin Luther King leyó su discurso en las gradas del Lincoln Memorial, en la histórica Marcha sobre Washington.

Yo también tuve un sueño. Despierto soñé que Martin Luther King se llamaba en realidad Amancay Lientur, no era negro, pero sí mapuche chileno. Soñé que en lugar de pronunciar su mítico discurso en la explanada de Washington en la gran marcha por los derechos civiles de los negros; era una marcha por los derechos de los mapuches en la Plaza de la Constitución. Ahí, al frente de la Moneda. Que en lugar de ser un pastor bautista norteamericano; era un pastor bautista chileno.

Tuve un sueño. En lugar de boicotear los buses de los blancos, yéndose a sus trabajos caminando; las nanas mapuches dejaron de ir a mudar guaguas y a asear pisos; los panaderos ya no fueron a amasar pan para los huincas; y tampoco salieron a recoger la basura al trasnoche. Y los temporeros de Huichaue y Maquehue, de la región de la Mapuchía (y no de La Araucanía), no fueron na’ pal norte a las cosechas.

Entonces soñé que el mítico discurso de Martin Luther King decía así: “Hace doscientos años, un gran patriota, cuya simbólica sombra nos cobija hoy, firmó la Proclama de la emancipación. Este trascendental decreto significó como un gran rayo de luz y de esperanza para millones de mapuches, chamuscados en las llamas de una marchita injusticia. Llegó como un precioso amanecer al final de una larga noche de cautiverio. Pero, doscientos años después, el mapuche aún no es libre; doscientos años después, la vida del mapuche es aún tristemente lacerada por las esposas de la segregación y las cadenas de la discriminación; doscientos años después, el mapuche vive en una isla solitaria en medio de un inmenso océano de prosperidad material; doscientos años después, el mapuche todavía languidece en las esquinas de la sociedad chilena y se encuentra desterrado en su propia tierra.

Ahora es el momento de hacer realidad las promesas de democracia. Ahora es el momento de salir del oscuro y desolado valle de la segregación hacia el camino soleado de la justicia racial. Ahora es el momento de hacer de la justicia una realidad para todos los hijos de Dios. Ahora es el momento de sacar a nuestro país de las arenas movedizas de la injusticia racial hacia la roca sólida de la hermandad.

Sería fatal para la nación pasar por alto la urgencia del momento y no darle la importancia a la decisión de los mapuches. Este verano, ardiente por el legítimo descontento de los mapuches, no pasará hasta que no haya un otoño vigorizante de libertad e igualdad.

Y quienes tenían la esperanza de que los mapuches necesitaban desahogarse y ya se sentirán contentos, tendrán un rudo despertar si el país retorna a lo mismo de siempre. No habrá ni descanso ni tranquilidad en Chile hasta que a los mapuches se les garanticen sus derechos de ciudadanía. Los remolinos de la rebelión continuarán sacudiendo los cimientos de nuestra nación hasta que surja el esplendoroso día de la justicia.”

Entonces desperté a la realidad. Al pobre pastor bautista lo taparon con cartas que hablaban de que la política no sé qué cosa; y los otros pastores lo disciplinaron y más encima se quedó sin iglesia.

Pero igual tengo un sueño….

viernes, 21 de diciembre de 2007

La Otra Navidad

Alguna vez también hice teatro. Así que para una Navidad montamos una obra en la Plaza de Armas de Curicó, en el frontis de la Catedral y antes de la medianoche, cuando comienza la Misa del Gallo. Fue genial. La calle estaba llena de gente. La obra culminaba con las campanas al vuelo y la gente comenzó a ingresar a la iglesia.
Recuerdo esa Navidad porque fue diferente. Las demás han sido siempre igual: Cena, luces y regalos. Cuando tuve un encuentro con Jesús y me hice miembro de una iglesia, se le agregó el panorama Navideño de ir al Programa de Navidad... que todos los años es igual y si me preguntan cuál recuerdo, ninguno, porque es siempre lo mismo (a veces como Pastor de una iglesia local prediqué el mismo mensaje y los hermanos ni se enteraron).

¿Qué harás de diferente esta Navidad para que sea Navidad? ¿Cuál será la buena noticia que anunciarás?
He aquí un mensaje diferente por paganos, pecadores (encabezados por la "hermanita" Madonna), incircuncisos, que nos recuerdan qué es Navidad.

martes, 18 de diciembre de 2007

Amantes de Verona

Era un niño cuando fui al cine a ver “Romeo y Julieta”, la clásica de 1968, con la Olivia Hussey como Julieta. Me impresionó la destructiva consecuencia del egoísmo y del odio en el ser humano. La música era conmovedora. Oscar Soto me hizo llegar este link donde Moroco usa el tema central de la película en un rap que nos hace pensar no en que la vida es injusta, sino que el corazón de las gentes es el injusto.

¡Qué oportuno! Porque en Navidad nos olvidamos de las calles de la ciudad, de los pobres que no se ven con sus compras navideñas, ni de los niños que se dormirán sin saber qué es la Navidad. Y con chic@s distorsionad@s para olvidarse que esta Navidad, así como lo celebra este mundo, no es para ellos. Escuchen, piensen y hagan algo con Jesús…